El cielo estaba iluminado por un tenue color rojizo; en el aire se respiraba una tensión indescriptible y en los pechos el corazón se agitaba con fuerza; Quizás no fuera nada. Sin embargo, todos en la aldea eran consientes de lo que significaba aquel cielo carmesí, aquellas nubes de sangre que rebosaban el cerro, esa tensión pesada, los corazones desbordados la angustia. Eso no puede anunciar más que una tierra cubierta de sangre, un mañana triste y vacio.
La noche termino de caer. El cielo se fue oscureciendo lentamente aumentando el nerviosismo y haciendo que todos tuvieran miedo al amanecer los niños se refugiaron en los bohíos junto a sus padres y los viejos se encerraron a conversar acerca del devenir. Sin embargo; Timanco y Guaitiquia aprovecharon la inquietud de sus vecinos para escabullirse en el bosque y empezar a amarse.
Los días previos a esa noche habían traído consigo mas y mas malas noticias; del norte, el sur, el oriente, de occidente malas noticias que iniciaron 40 años atrás cuando Guatepán o la Gaitana madre de Timanco era apenas una niña y no podía imaginar las desgracias que rodearía a su gente cuando ella fuera una cacica. Las noticias llegaron de las Antillas 25 lunas después de su ocurrencia según la voz unos hombres en grandes naves habían desembarcado en las islas; eran criaturas nunca antes vistas blancos, altos con vello en la cara, los brazos y el pecho ; vestidos con curiosos trajes mal olientes y sucios ; venían acompañados de grandes bestias de cuatro patas en las cuales cabalgaban y otros pequeños animales que los acompañaban también de cuatro patas que lanzaban aullidos y atacaban a los nativos hasta despedazarlos.
La Gaitana era una niña cuyo nombre original Guatepán de la voz quechua Wateqpa-y significa la que envalentona, la que instiga a la multitud. Y aunque ella aun no entendiera el por qué de su nombre le gustaba pensar que un día no muy lejano haría algo grande, algo que al igual que lo que hicieron sus antepasados trascendiera al tiempo, a la muerte. De esta manera la Gaitana empezó desde muy pequeña a temer la llegada de esos hombres e imaginar su apariencia. Durante su infancia la Gaitana disfrutaba recorrer su tierra aquel valle majestuoso bañado por el rio Guacacallo o “rio de las sepulturas” que alimentaba con su alma al gran Yuma el rio grande que cubría los territorios de tierras calientes al norte; donde los pijaos se peleaban las tierras con sus vecinos.
Este paisaje esplendoroso de grandes ríos, extensas llanuras y montañas inexploradas donde un cerro majestuoso ondeaba el rio y da al pericongo lugar característico de la región eran un orgullo para la Gaitana; sin embargo, había un lugar que la pequeña cacica disfrutaba visitar más que ningún otro, este era al sur en el territorio donde el rio Guacacallo que lleva todas sus aguas al Yuma se estrecha hasta medir solo dos metros y todo el poderoso caudal, toda la fuerza de la naturaleza golpea las rocas en un espacio que fácilmente se puede saltar. Cerca de allí , se encuentra una región mágica lugar de oficios religiosos donde estatuas megalíticas le rinden tributo a la fertilidad, los dioses y antepasados; allí en ese lugar exactamente en el más sagrado el lavapatas la Gaitana solía sentarse a pensar a imaginar el mañana y a pedir a los espíritus que le dieran valentía y coraje para guiar a su pueblo ;pues ya por esa época la aparente paz de los recién llegados ese encuentro pacifico de un inicio se había convertido en un baño de sangre en una antesala a la tragedia. Que el viento se había encargado de anunciar con los gritos de dolor traídos por la briza.
Las cosas no parecían mejorar con el tiempo se supo que en territorios lejanos tierra de los grandes imperios el exterminio se aproximaba; Moctezuma rey de uno de los más poderosos territorios fue asesinado y la desesperación se apodero ese día de todo el continente pues la idea del asesinato de un rey era inconcebible; pues un rey era lo más cercano a los dioses y su muerte era como perder la comunicación con el inframundo ; esta noticia recorrió con el cantar de los pájaros y el soplar del viento todo el territorio aborigen llegando rápidamente a los oídos de la Gaitana quien alucinó durante varios días con sus noches haciendo suya la desgracia pues con noticias tan tristes parecía no haber esperanza.
Sin embargo; el coraje era más fuerte que la desdicha y Timanco hijo de la cacica Gaitana este a su vez señor de los timanaes juro no permitir que nadie hiciera sufrir a su madre viuda ya desde hace tiempo cuyo único consuelo era su hijo Biponga o Timanco a quien le había cedido el dominio de parte de su territorio.
A pesar de los rezos y peticiones a los dioses la tragedia parecía ser inaplazable pronto llegaron noticas del exterminio de tribus poderosas del occidente Tuluas, Xamundies, Yotocos y los Bugas; quienes bañaron con su sangre todo el territorio sur occidental del país; donde fue fundada la ciudad de Popayan que habrio paso a la ocupación del valle de laboyos por él sur donde Belarcazar y otros abrían caminos y buscaba con desesperación el lugar donde estaba escondido el dorado. Cuando la Gaitana supo de la próxima llegada de tan temidos opresores mando a salvaguardar su más invaluable tesoro pues sabía que en territorio de esmeraldas y sal los templos religiosos habían sido destruidos sin consideración pues esos invasores predicaban lealtad a un rey que nunca habían visto y alabanza a una cruz sin sentido alguno; así que la Gaitana mando a cubrir con montículos el territorio del lavapatas y todas las estatuas megalíticas de sus antepasados todos los lugares donde durante el equinoccio de verano se le rendía culto a los dioses fueron cubiertos por la tierra y ocultos para salvarlos del exterminio.
Poco tiempo después enviados por Belarcazar; Pedro de añasco y Juan de Ampudia empezaron a hacer labores para por orden de Belarcazar fundar una ciudad que sirviera de puente de comunicación entre popayan y el centro del país así que añasco pidió a los caciques de la región que rindieran tributo y vasallaje al rey logrando el rendimiento del hijo de el cacique piguanza líder de los yalcones quien junto a sus hombres empezaron a formar parte del ejercito de añasco como anaconas indios que traicionaban a sus compañeros.
Añasco al ver que un joven cacique de la región se negó a rendirle tributo la noche propia de la desgracia luego de que el cielo se cubriera de rojo y los timanaes se durmieran presos de incertidumbre por lo que anunciaba el mañana; Timanco dejo ha Guaitiquia en su bohío y poco antes de la media noche se fue a dormir sin saber aun que el hijo de piguanza los había traicionado y guiado a los hombres de añasco hasta donde Timanco vivía, al quedar las casas tan alejadas unas de otras nadie noto la irrupción de los blancos y solo hasta la mañana siguiente nadie entendió lo que anunciaban los cielos.
A la mañana siguiente la noticia de la captura de Timanco se rego por todo el territorio y su madre junto a Guaitiquia fueron las primeras en embarcarse a la plaza de la recién fundada Timana allí en la plaza pública presenciaron como por orden de añasco Timanco fue azotado, golpeado y finalmente quemado vivo ; no valieron las suplicas de su madre, ni los lamentos de su amada para que toda la crueldad del español recayera sobre Timanco y con esto pretendiera intimidar a los aborígenes y lograr rendirlos sin batalla.
sin embargo; detrás de todo las intensiones de añasco eran otras el hijo de piguanza le había informado de un tesoro invaluable escondido por la Gaitana quizás fuera el dorado pues según el traidor este tesoro era gigantesco y había sido necesario cubrirlo con toneladas de tierra como si se cubriera toda una ciudad de oro así que tras haber matado a Timanco y dejar indefensa a la cacica pensó que con el asesinato de su hijo la intimidaría y ella terminaría entregándole el mapa de aquel tesoro escondido .
Pero contrario a lo esperado por Añasco la muerte de Timanco no significo la rendición de los indígenas y mucho menos de la Gaitana. contrario a eso lo que genero fue venganza de parte de ella quien luego de reponerse del dolor pero no de la pérdida de su hijo decidió crear un ejército nunca antes visto y con la ayuda del cacique piguanza pariente suyo y padre del traidor reunió cerca de 6 mil guerreros que en un principio no fueron necesarios pues añasco seguro de su victoria visito luego del asesinato de Timanco tierra de los yalcones para amedrantar a la cacica mostrando la seguridad de su triunfo; pero sin pensarlo se vio atrapado por piguanza quien en un principio pensó en dejarlo ir pues este lo amenazo con matar a su hijo que de traidor paso a traicionado; sin embargo, la Gaitana presa del dolor y la rabia lo persuadió asegurándole que si no atrapaban a añasco en ese momento más temprano que tarde este también lo quemaría vivo ; así que piguanza ordeno la captura de añasco asesinando siete de sus acompañantes dejando ir a dos y entregando vivo a la Gaitana al asesino de su hijo y autor de sus desgracias.
Ahora bien con añasco en manos de la cacica esta pudo vengar a su hijo así que valiéndose de todo su coraje y alimentándose de su ira de madre herida; le saco los ojos al malvado dejando que la sangre se deslizara por sus mejillas luego le abrió un orificio en la mandíbula, debajo de la lengua por donde introdujo un lazo para llevar en cabresto arrastrando al hombre de pueblo en pueblo; de plaza en plaza mostrando a todos su Azaña. Luego cuando la muerte de añasco era inevitable empezó junto a sus coterráneos a cortar sus extremidades y luego de la muerte del desgraciado le cortaron la cabeza e hicieron una fiesta donde las mujeres Cantaban y danzaban y donde con lágrimas y sangre se enjuagaba el dolor de una perdida.
Sin embargo, la venganza no era el único fin de la Gaitana pues a pesar del dolor por la pérdida de su hijo la Gaitana era consciente de su papel dentro de la comunidad; así que saciada la venganza y con un poco de descanso en el espíritu pero aun con la sangre hirviente de violencia por los anteriores acontecimientos ; el ejercito antes formado por ella y por piguanza con cerca de seis mil guerreros armados con arcos, flechas, lanzas y muchos implementos que de los españoles habían tomado se dispusieron a atacar.
Miembros de todas las comunidades indígenas que en épocas pasadas se disputaban territorios ahora se unían bajo un mismo fin recuperar la tierra que por nacimiento les pertenecía de esta manera los Piranas, los nasas, los yalcones, los guanaca, la federación pijao, avirama, guacaes, yaporonge coyaimas y todos a quienes los españoles habían maltratado y destruido en parte se unieron para luchar por su libertad; por la de sus hijos y sus mujeres por la de su pueblo. y es así como muchos españoles murieron y de no ser por la traición del cacique Imando vecino de los yalcones quien delato la ofensiva indígena a Juan de Ampudio remplazo y compañero de Añasco . Tal vez otra habría de ser la historia pues muchos combatientes cayeron y la victoria fue entonces de los invasores.
Pero a pesar de la derrota la Gaitana no estaba dispuesta rendirse; antes muerta que entregada al vasallaje. Así que decidió buscar ayuda espiritual visitando una guaca. en el oráculo le pregunto a su mohán que debía hacer si debía seguir luchando o tal vez rendirse y entregar su tesoro y con el consentimiento de este se entrego de nuevo a la batalla pero al desconocer la identidad del delator pues Imando no había sido descubierto fueron de nuevo vencidos y con esto muerto el cacique Matambo líder de una de las tribus lo que genero terror entre los indios que por miedo a morir y al no estar dispuestos a entregarse a vasallaje impuesto por un rey que no conocen y no dejar sus dioses por una cruz sin sentido, se internaron en las montañas y terminaron muriendo de viruela , de guerra y de hambre hasta reducir su número a poco mas de 600 indígenas.
Por su parte la Gaitana triste por las derrotas pero tranquila por la venganza realizo una fiesta donde la Chicha de maíz, la coca, el cacao, el oro, la plata, esmeraldas estuvieron por doquier y como en un derroche del fin se entrego a la felicidad de despedirse del mundo. Alistando sus armas y guiando al ejercito que le quedaba le entrego el mapa a Guaitiquia y para distraer a Juan de Ampudia lo incito a que la siguiera para conseguir el mapa del tesoro este llevado por la avaricia de un tesoro invaluable continuo su camino tras ella seguro de que ella era la única que conocía el lugar donde había una ciudad de oro. la Gaitana lo hizo seguirlo hasta aquel mágico lugar donde el rio Guacacallo que alimenta al gran Yuma se estrecha a una anchura de poco más de dos metros allí lo hizo ir y saltando el estrecho dejo el mapa al otro lado del rio ella junto a sus soldados se lanzaron a las profundidades del rio para no volver jamás; mientras tanto Ampudia por la avaricia de saber dónde estaba el tesoro salto el estrecho y al tomar el supuesto mapa lo abrió y solo vio escrito en un español casi incomprensible una frase que decía más o menos así “ estas parado sobre el tesoro” y este creyendo que en el fondo del rio donde se habían lanzado los indígenas estaba el tesoro se lanzo y ordeno a sus hombres a lanzarse sin saber que todo era una trampa pues de aquel estrecho nadie sale y el tesoro estaba cerca pero no era oro sino piedras que en ese momento solo tenían valor para los indígenas.
Por otro lado Guaitiquia al conocer el lugar y el valor del tesoro que si los españoles lo hubieran encontrado solo lo miraría como un montón de piedras talladas sin ningún valor. Decidió que el solo hecho de saber dónde estaba ponía aquel sitio sagrado en peligro pues no creía tener el suficiente valor para proteger un tesoro tan valioso; ni la sabiduría para guiar un pueblo sin caciques.
Además, no concebía su vida sin Timanco y sin la Gaitana. Por lo cual se vistió con sus mejores trajes quemo el mapa para no dejar rastro de él y se dirigió al cerro que da al pericongo y tras mirar con nostalgia el pasado cercano recordando la noche mágica de amores con Timanco donde sin importar lo que anunciaba aquel cielo carmesí aquellos corazones desbordados, aquel anuncio de un mañana bañado en sangre; escaparon al bosque y se dieron besos interminables ; caricias desbordantes; pequeñas muertes hasta quedar sin aliento y detenerse un momento a mirar la oscuridad del cielo, a respirar la pureza del aire a sentirse por última vez el uno al lado del otro; a solo tocarse sin saber que era la última vez que estarían cerca.
Guaitiquia miro con nostalgia su tierra recordó la belleza de la madre de su amado, la valentía de los guerreros de su pueblo, el coraje de Timanco la inocencia de los niños y el dolor de las muertes. Miro y lloro. Lloro y maldijo el día en que en que esos hombres blancos tocaron su tierra maldijo el oro y la plata maldijo la avaricia de ampudia; la maldad de añasco; el rey que no conoce y la cruz que no tiene sentido; rezo a sus dioses y se dejo caer a la profundidad del abismo mientras juraba proteger eternamente ese cerro; el cerro de Guaitiquia.
Tuvieron que pasar más de 400 años para que alguien encontrara el tesoro escondido; tuvo que pasar todo ese tiempo porque solo con los años las personas entienden el valor de las cosas; de esas cosas que no son de oro ni de piedras preciosas sino que están hechas de creencias; que salvaguardan esperanzas y le dan vida a los pueblos. Allí todo lo que fue cubierto un día por una cacica salió a la luz y a pesar de los saqueadores aun conserva el maravilloso esplendor de una civilización más antigua que la de la Gaitana pero que ella protegió hasta el fin. San Agustín
Un poco más al sur está el estrecho del magdalena y quizás un poco de la Gaitana quede allí pues innumerables muertes han ocurrido jóvenes aventureros que como prueba de valor y reto al rio saltan el estrecho pero al intentar regresar son atraídos por la fuerza de la naturaleza y terminan perdidos en la profundidad del rio como si algo sobrenatural los llamase y hundiese en lo más profundo del pasado engañados al igual que Ampudia.
Por su parte en el sitio conocido como pericongo en los límites entre los municipios de Timana y Altamira en el cerro conocido como Guaitiquia se dice que en las noches suele aparecer en su cumbre una joven de cabello largo vestida con atuendos indígenas muy bellos mirando con nostalgia su alrededor y limpiando con cuidado sus lagrimas allí donde Guaitiquia se lanzo parece permanecer eternamente en su cerro.